El lobby tradicional pasa de ser un mero espacio de tránsito a convertirse en el centro neurálgico del hotel, un espacio para socializar donde se eliminan las barreras físicas y la recepción pasa a un segundo plano. El lobby se adapta a las necesidades de las nuevas generaciones, la era del nómada digital, transformándose en un lounge colaborativo donde conectar con otros viajeros y ciudadanos mientras disfrutar de diferentes actividades de entretenimiento y restauración.
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METROS CUADRADOS
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de ejecución
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